Don Pedro es originario de Ichupio, municipio de Tzinzutzan, comenzó a interesarse en la música a los 14 años por influencia de su padre. En 1972 creó la agrupación de cuerdas “Mirando al Lago”, mismo tiempo en que compuso sones para la danza de los Tumbís como “Mirando al lago”, “Flor de ánimas”, “Joven bailador”, “El gabachito” y “Flor de Nochebuena”.
Ha viajado en compañía de su agrupación por la mayor parte de la República Mexicana y por algunas ciudades de Estados Unidos. También ha impartido diferentes talleres de violín, su especialidad. Lo más reciente de su trabajo fue su exitosa presentación en el Palacio de Bellas Artes como participante de la K´uínchecua (Fiesta Michoacana).
Durante el homenaje “Mirando el lago” interpretó sones como “Recuerdos de Zacán”, “Ramo de Orquídeas” y “Noche de muertos”, entre otros. La maestra Adelina compartió su voz con la agrupación con temas como “Elenita” y “María de la luz”.
Minutos después el Mariachi Charanda, proveniente de la ciudad de México, tomó el escenario, siendo los invitados principales del homenaje. Ellos conforman un mariachi de estilo tradicional que cuenta con 33 años de trayectoria. Durante ese tiempo ha conformado un interesante repertorio de sones de la región de maricahi – occidente de país-, así como de música tradicional mexicana. Deleitaron los oídos de los asistentes con el son de “La chata”, “El limón”, “El herradero”, “Las alas versión antigua”, entre otros.
En cuanto al público, respondió de una excelente manera, participando con aplausos y gritos al finalizar las intervenciones de ambos grupos.