Morelia, Mich., 17 de junio del 2013.-La Orquesta Sinfónica de Michoacán (Osidem) continuó ofreciendo funciones los días jueves y viernes, con motivo de llegar a una audiencia más amplia para exponer obras de los destacados compositores de todos los géneros. El director artístico de la agrupación, Miguel Salmón del Real, fue anfitrión del pianista Jorge Federico Osorio, quien en ambas presentaciones fue ovacionado por el público local.
Ante un recinto lleno en su capacidad, el Teatro Ocampo, los músicos deleitaron a los asistentes con composiciones de Ludwig van Beethoven. Es propósito de la Osidem difundir la música que se ha consagrado en el gusto del público a nivel internacional y que es representativa de los grandes genios de todos los tiempos.
Para dar continuidad con la serie de conciertos con obras del músico alemán, en esta ocasión se desarrolló el Concierto para Piano Número 5, opus 75, en Mi bemol mayor, también denominado “Emperador” y la Sinfonía Número 5, opus 67, en Do menor. La programación seleccionada por la orquesta constituye un menú sonoro muy agradable para los oídos de quienes gustan de la música romántica.
El concierto “Emperador” es uno de los más conocidos de Beethoven; el primero los tres movimientos que lo integran, el Allegro, parte de una nota orquestal para dar paso a una serie de figuras melódicas a cargo del piano que desembocan en una fiesta de compases. La audiencia gustosa se mantuvo al tanto del tránsito de modos mayor y menor que implica esta parte de la pieza, disfrutó de un Adagio un poco mosso escrito con sencillez y profundidad y un Allegro con forma de rondó, que pone fin a la obra.
La actuación del solista mexicano Jorge Federico Osorio fue bien recibida por los michoacanos, su estilo de ejecución lo ha consagrado como uno de los pianistas más importantes en la esfera musical en Latinoamérica, algunos países de Europa y de Asia. Goza de un dominio privilegiado para establecer un diálogo con el instrumento y despertar las emociones del público mediante su particular desempeño sobre el escenario.
La audiencia michoacana se puso de pie para despedir al pianista con una lluvia de aplausos, agradeciendo su presencia en esta ciudad; Osorio ofreció algunas piezas fuera del programa, entre éstas composiciones de Johannes Brahams para piano solo. Entre su repertorio grabado, el pianista tiene conciertos diversos de Beethoven, Mozart, Schuman, Ravel, Rodrigo, Ponce y Tchaikovsky.
Con la interpretación de la segunda obra la Quinta Sinfonía de Beethoven, la Osidem refrendó su calidad artística, ofreciendo una puesta de altura. El inicio de esta obra con el primer movimiento, Allegro con brio, tipo sonata, es conocido mundialmente por sus cuatro notas interpretadas por los instrumentos de cuerdas y por los clarinetes de manera unísona. Se caracteriza por los cambios de intensidad y de tonalidad, finalizando con una coda muy larga.
Aunque son populares el Andante con moto y los dos Allegro que completan la obra, son ricos en contrastes y variaciones de los temas melódicos, describiendo una armonía típica de la creación beethoveniana. En conjunto los fragmentos llenos de contrapunto y pizzicato hacen esta Sinfonía un ejemplo de una orquestación lograda con excelencia y la colocan como una de las favoritas del público de todos los tiempos.