Morelia, Mich., 27 de mayo del 2013.-Los valses más populares del compositor Johann Junior Strauss,  una pieza especial para corno y acompañamiento orquestal, y una de las sinfonías más grandes escritas por el genio de la música Wolfgang Amadeus Mozart, entregó la Orquesta Sinfónica de Michoacán (Osidem) en el concierto a cargo de Héctor Quintanar como director invitado.

 

En la presentación estelar sobre su escenario, el Teatro Ocampo, la Osidem recibió también al cornista estadounidense Jon Gustely, quien  ejecutó con maestría el corno francés, ante la audiencia asistente  al recinto. El Secretario de Cultura, Marco Antonio Aguilar Cortés y el director Promoción y Fomento Cultural de la Secretaría de Cultura de Michoacán (Secum), Raúl Olmos Torres, fueron anfitriones de los invitados especiales.

 

Con la interpretación inicial de las obras vienesas “Vals Emperador” y “Vals El Danubio azul” (derivado de su título en alemán An der schönen blaue, Por el bello Danubio Azul), Quintanar despertó una atmósfera de empatía entre los músicos y su audiencia, sabiendo conducir con certeza las cuerdas, los alientos y las percusiones que resaltan en ambas composiciones de estructura amena.

 

Las figuras melódicas de estos valses, popularizadas por el prolífico Strauss y conocidas de forma amplia a nivel internacional, fueron recibidas con gusto por el público michoacano para enriquecer su acervo musical. De igual manera, reconocieron el talento del solista al demostrar las cualidades sonoras del corno inglés, mediante la ejecución del Concierto para Corno y Orquesta Número 1 en Mi bemol mayor, de Richard Strauss.

 

Esta obra compuesta por tres movimientos inicia con un Allegro con estilo legato para el corno, es decir, el instrumento solista  lleva un flujo continuo y “ligado” a la melodía. Luego, sigue un Andante donde Gustely hizo resaltar una notación fortissima que dio paso al cierre del mismo. Y, para concluir, se interpretó otro Allegro, donde el corno es cómplice de las flautas haciendo sonar el estilo de un rondó.

 

El contraste musical de los géneros presentados por la Osidem en este concierto  se acentuó con la exposición magistral de la Sinfonía Número 41 en Do Mayor de Mozart. La composición catalogada con la referencia K.551, mejor conocida bajo el nombre de “Júpiter”, fue la última de su tipo escrita por el genio austriaco y es considerada una de las máximas obras sinfónicas del periodo clásico. “Júpiter” está estructurada en cuatro movimientos: Allegro vivace, Andante cantábile, Menuetto: Allegro y Finale: Allegro molto.

 

El director huésped Héctor Quintanar fue discípulo y asistente del compositor mexicano Carlos Chávez durante su estancia en el Conservatorio Nacional de Música; enfocó sus estudios en música electrónica durante los años 70 del siglo XX, ha sido funcionario administrativo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y del extinto Instituto Michoacano de Cultura (IMC). Recibió la Medalla al Mérito Artístico en el año 2000, otorgada por el Gobierno del Estado de México,  través del Conservatorio de Música; y en 2008, la Medalla Mozart.

 

El cornista Jon Gustely es integrante Concertista de Bellas Artes de la Coordinación Nacional de Música y Ópera del INBA; desde el año 2007 se desempeña como cornista principal de la Orquesta de Louisville y de forma paralela participa con orquestas de varios países como solista invitado. Ha ofrecido conciertos con agrupaciones mexicanas como son la Filarmónica de la Ciudad de México, Orquesta  Sinfónica Carlos Chávez y Orquesta Sinfónica de Minería, entre otras; en Estados Unidos, con las sinfónicas de Saint-Paul, Saint-Louis y Pittsburgh.